martes, 10 de septiembre de 2013

La verdad de como NO Usar tarjetas de créditos en México. Estafa de los...



Video de Andrés Garcia publicado el 11/07/2012 en Youtube.

Consejos para usar tarjeta de crédito


El autor Joan Lanzagorda considera que las tarjetas de crédito no deben ser usadas como fuente de financiamiento, sino únicamente como medio de pago. Es decir, cada mes uno debe poder pagar el 100% del saldo, para no generar intereses, pero en cambio sí gozar de sus beneficios.
Existen varias razones por las cuales sostengo lo anterior, como por ejemplo:
  • Las tasas de interés que cobran las tarjetas de crédito son altísimas. El CAT más bajo está rondando el 36% anual, pero hay instituciones que están cobrando hasta el 150% anual. Es una locura financiarse a estas tasas de interés.
  • Las personas que suelen tener deudas con tarjeta de crédito, por lo general están gastando más de lo que ganan. Esto sucede en la gran mayoría de los casos – se acostumbran a comprar un bien y a pagar sólo el mínimo (el cual muchas veces equivale a tan sólo el 5% del saldo total). Y luego otro, y otro. Esto, desde luego, no es sostenible en el largo plazo y por eso se generan muchos problemas financieros.
  • Existen estudios que comprueban que quienes utilizan tarjetas de crédito de forma regular, aún cuando paguen cada mes el saldo total para no generar intereses, gastan en promedio un 15% más que las personas que pagan en efectivo o con tarjeta de débito.
Sin embargo, por otro lado yo pienso que es necesario tener una tarjeta de crédito, ya que nos facilitan varias cosas, como por ejemplo reservar un hotel o rentar un auto. Si no tenemos una, tendríamos que dejar un depósito en efectivo, lo cual en ocasiones puede ser complicado. Por otro lado, nos pueden brindar beneficios importantes, como ciertos programas de recompensas. Además, suelen ser más seguras que las tarjetas de débito, desde mi punto de vista.

El tema de fondo no es tenerla, sino saberla utilizar de manera adecuada. Y para ello, el punto de partida es conocernos a nosotros mismos, entender nuestro patrón de consumo (de gastos), y a partir de él poder elaborar un presupuesto que funcione.

Si una persona es impulsiva en su gasto (no puede controlarse) – es una buena opción dejarlas en casa y que utilice sólo efectivo. En estos casos, únicamente hay que utilizarlas (acompañados, desde luego) si tenemos una compra planeada (que podamos pagar completamente al final del mes, o bien financiada en una promoción sin intereses – siempre que previamente la hayamos considerado en nuestro presupuesto).
Por otro lado, una tarjeta de crédito no es para emergencias. Para esto existe el fondo de emergencias. Lo que menos queremos, ante una situación adversa, es tenernos que endeudar (y menos a tasas de interés tan altas).
Como podemos ver, al final todo esto forma parte integral de la planeación financiera personal. Por eso es tan importante saber elaborar un plan que parta de nuestra situación actual y de nuestros objetivos financieros – y que esté basado en nuestros valores.

Bibliografía:

Lanzagorta, Joan(2010). Consejos para usar tarjeta de crédito. Recuperado el 10 de Agosto de 2013 en: http://www.planeatusfinanzas.com/consejos-para-usar-tarjeta-de-credito/#axzz2eXSHrMz9